El Colegio Bernardo Valdivieso no solo es la institución educativa más antigua del Ecuador, sino también una de las primeras en Latinoamérica. Fundado en 1727 por los jesuitas, este colegio ha sido testigo de cambios históricos y educativos que han marcado generaciones enteras.
El Legado de Bernardo Valdivieso: Más que un Nombre
Nacido en septiembre de 1745, Bernardo Valdivieso fue un ilustre lojano que dedicó su vida al bienestar colectivo. Su principal legado fue la educación, pues su visión permitió la formación de grandes profesionales en Derecho, Medicina, enseñanza y vocaciones religiosas.
Tras su fallecimiento en julio de 1805, su memoria quedó inmortalizada. En 1909, el Congreso Nacional del Ecuador otorgó su nombre al colegio como un acto de agradecimiento por su contribución a la ciudad y al país.
Un monumento en su honor, erigido el 24 de mayo de 1909 en el Parque Central de Loja, rinde tributo a este insigne personaje.
La Evolución del Colegio: Del Pasado al Presente
Orígenes de la Institución
El colegio inició como una obra de los jesuitas en 1727. Tras su expulsión del territorio americano, la institución cerró. Años después, profesores colombianos, junto con Miguel Riofrío, fundaron el Colegio de la Unión. En 1909, ambas instituciones se unificaron bajo el nombre “Bernardo Valdivieso”.
Durante el siglo XX, el colegio destacó como un centro de formación académica de alto nivel, añadiendo facultades de Derecho y Medicina, que dieron lugar a figuras influyentes de la época.
Cambios Recientes
Hoy categorizado como Unidad Educativa del Milenio, el colegio ha experimentado transformaciones significativas en infraestructura y metodología:
- Modernización: Se realizó una inversión de 14 millones de dólares para renovar las instalaciones.
- Nuevas tecnologías: Los métodos de enseñanza han incorporado herramientas digitales, pero algunos consideran que esto ha llevado a una pérdida de identidad histórica y educativa.
Desafíos Actuales
Según el historiador y exdocente Luis Bernardo Cuenca Alvarado, el colegio enfrenta problemas de recursos y deterioro, afectando directamente la calidad de la educación. Pese a las mejoras tecnológicas, Cuenca enfatiza la necesidad de fortalecer los valores y principios dentro de las aulas, recuperando la identidad que hizo del Colegio Bernardo Valdivieso un referente nacional.
Tradiciones que Perduran
Cada año, exestudiantes, conocidos como “bernardinos”, se reúnen para celebrar la historia del colegio con marchas y eventos en las calles principales de Loja. Este acto de nostalgia y orgullo mantiene vivo el legado de Bernardo Valdivieso.