NUEVO HORARIO DE APAGONES EN ECUADOR A PARTIR DEL 21 DE OCTUBRE DEL 2024- ANUNCIADO POR EL PRESIDENTE NOBOA
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, ha tomado una serie de decisiones significativas en respuesta a la crisis energética que ha afectado al país, exacerbada por la sequía más severa en seis décadas. Desde el 21 de octubre de 2024, los horarios de apagones se reducirán paulatinamente, lo que ofrece un rayo de esperanza para los ciudadanos y el sector productivo.
En un mensaje difundido a través de redes sociales, Noboa explicó que los cortes de energía se implementarán de la siguiente manera:
- Semana del 21 al 27 de octubre: Apagones de 8 horas diarias.
- Semana del 28 de octubre al 5 de noviembre: Apagones de 6 horas diarias.
- Semana del 6 al 10 de noviembre: Apagones de 4 horas diarias.
Esta programación es parte de un esfuerzo más amplio para mitigar el impacto de la crisis energética, que ha resultado en cortes de hasta 12 horas diarias, complicando la vida cotidiana y las actividades laborales. La situación ha llevado a un creciente descontento entre la población, reflejado en protestas recientes en ciudades como Cuenca.
Una de las medidas más destacadas anunciadas por Noboa es el subsidio del Estado para los primeros 180 kilovatios de consumo en zonas residenciales, que comenzará en noviembre. Esta decisión busca aliviar la carga financiera de los hogares, especialmente en un contexto donde la inflación y el costo de vida han aumentado.
El presidente también enfatizó que, aunque el país no puede controlar las lluvias ni cambiar la dependencia histórica de la energía hidroeléctrica, el Gobierno está implementando estrategias para diversificar la matriz energética. Se prevé la incorporación de 1,598 megavatios al sistema eléctrico nacional, lo que incluye la compra de generación permanente en tierra. La ministra de Energía, Inés Manzano, explicó que la dependencia del agua ha hecho que el colapso energético fuera inevitable frente a la sequía y el cambio climático.
Además, se están considerando proyectos en energías renovables como la solar, eólica y geotérmica, con el objetivo de construir un sistema eléctrico más robusto y menos vulnerable a fenómenos climáticos adversos.
La ministra de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, Sonsoles García, agradeció al sector productivo por su resiliencia y capacidad para mantener el empleo y la innovación en tiempos difíciles. Para apoyar a este sector, el Ejecutivo ha adoptado incentivos fiscales y medidas logísticas, además de proponer proyectos de ley que fomenten la generación eléctrica privada.
Sin embargo, la crisis energética no solo es un desafío gubernamental, sino que también afecta a la economía del país. Las estimaciones indican que Ecuador pierde alrededor de 12 millones de dólares por cada hora de desconexión, lo que subraya la urgencia de encontrar soluciones efectivas.
En un contexto de creciente descontento social, el Gobierno también ha decidido suspender el cobro de las planillas de luz de septiembre debido a las quejas sobre aumentos en las tarifas, a pesar de los apagones. Esta decisión busca mitigar el impacto financiero sobre los ciudadanos y mejorar la percepción pública del gobierno en un momento crítico.
La reducción de los apagones es un paso positivo, pero se requiere un enfoque sostenible y a largo plazo para asegurar que la crisis no se repita en el futuro. La diversificación de la matriz energética, la inversión en infraestructura y el fomento de las energías renovables son esenciales para construir un sistema energético que no dependa exclusivamente de las condiciones climáticas.
La situación actual es un llamado a la acción para todos los sectores de la sociedad ecuatoriana. La colaboración entre el Gobierno, el sector privado y la ciudadanía será fundamental para enfrentar este desafío y garantizar un futuro energético sostenible. Con las medidas anunciadas, se espera que Ecuador pueda navegar esta tormenta y emerger más fuerte y resiliente.
